ACERCA DE MI

Soy contador retirado. De no haberme decidido por tan agotdora profesión, hoy tal vez fuera un político muerto o retirado. Siempre he estado interesado en los asuntos políticos; tanto nacionales como internacionales. Lejos de ser comunicador social profesional, me considero capaz de incursionar un tanto en el universo de opiniones políticas, sociales y económicas de manera conciente, pues todo ser humano que comprenda en qué medida es afectada o beneficiada la Humanidad por las acciones emanadas de las actividades de sus semejantes en estas tres principales disciplinas, que son las que determinan el estado de bienestar o malestar de los humanos, debe y tiene la obligación de opinar hasta donde se lo permita su grado de comprensión de las problemáticas e, incansablemente, aprender cada día más, pues de lo contrario no podrá andar al ritmo de los tiempos.

Entiendo perfectamente que quedarse en el empirismo  no es un elemento valorado positivamente por los profesionales (politólogos, sociólogos, economistas, periodistas, escritores, Etc.), pero me empeño en opinar con la mayor profundidad y claridad posibles, no para expertos, sino para aquellos a quienes les envuelven los términos más simples en una retórica llena de términos y frases incomprensibles y muchas veces hast de manipulaciones expeditas.

Lo más importante es que lo que se opine tenga los elementos esenciales, como sentido, lógica, veracidad, realismo, ética y buenas intenciones; pero opinar es un derecho que no es exclusivo de eruditos o académicos. Precisamente seres con tales condiciones privilegiadas, son los grandes engañifes, simuladores y perversos dominadores de las masas.

GRACIAS A LOS QUE ME PUEDAN VALORAR POSITIVAMENTE, PERO TAMBIEN NEGATIVAMENTE, SIEMPRE QUE SEA CON ESPIRITU CRITICO, EN EL SENTIDO POSITIVO DE LA PALABRA.